El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, llega a Cuba en busca de una capacitada atención de salud, estrictas medidas de seguridad y total discreción, una combinación que pocos países le pueden ofrecer.
El caso lo lleva directamente su amigo y mentor, el comandante Fidel Castro. Él insistió para que le realizaran los exámenes que detectaron el cáncer y también fue él quien le comunicó la mala noticia a Chávez cuando se supieron los resultados. Ahora regresa para el tratamiento de quimioterapia, un proceso normal en pacientes afectados por esa enfermedad. No hay datos sobre cuánto tiempo estará en Cuba, pero solicitó permiso al congreso venezolano para ausentarse más de 5 días.
Antes de salir para la isla se reunió con el personal del palacio presidencial para expresarles su optimismo: "estoy obligado a vivir, viviré, se los prometo… una vez más regresaré y regresaré mejor que como me voy, con más vida".