En una increíble afirmación, el papa Benedicto XVI dijo en el Vaticano, que la iglesia verdadera, es decir, la que tiene el monopolio de Dios, es la Católica y que los demás están fuera del paraíso.En el documento, publicado por el Vaticano, el pretendido sucesor de San Pedro, precisó que las denominaciones cristianas fuera del catolicismo no son iglesias de Cristo en el verdadero sentido de la palabra.
El documento fue emitido este martes por la Congregación para la Doctrina de la Fe, un organismo que fue en su momento encabezado por el actual papa Benedicto XVI.
El documento establece en términos generales que Cristo "sólo constituyó una Iglesia" en la tierra, y esa "subsiste en la Católica" gobernada por el sucesor del apóstol Pedro, es decir, el Papa.
Es impensable escuchar unas afirmaciones de este tipo en los albores del siglo XXI, pero deja ver muy claro que los pasos que está dando el papa son hacia atrás, como el cangrejo. Acaba de aprobar las misas en latín y ahora viene a decir que la Iglesia Católica Romana es la única avalada por Dios, como si Dios tuviera dueños.
El documento afirma que las iglesias cristianas ortodoxas son verdaderas aunque sufren de una "herida" por no reconocer la primacía del Papa.
Mientras que sobre otras denominaciones cristianas protestantes y anglicanas se refiere a que la "herida es más profunda ( ... ) y es difícil ver cómo podría atribuirse a ellas el título de Iglesia".
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