martes, 21 de junio de 2011

Chávez despacha desde La Habana

El omnipresente se destaca por su ausencia. Hugo Chávez no pisa Venezuela desde el 5 de junio: lleva más de diez días recuperándose en Cuba de una operación de urgencia por un absceso pélvico. Y la información es vaga y escueta. A veces, también es equivocada.


En la noche del lunes se encendieron las alarmas cuando la Agence France Presse (AFP) emitió un alerta: "Chávez admite que su enfermedad es 'más complicada de lo pensado'". Menos de media hora después el propio medio dio marcha atrás, "favor corregir este alerta, la información está equivocada".



Datos sin confirmar abundan en una situación en la que predomina el silencio oficial. Los medios extrañan la lejanía de Chávez. Sus seguidores temen y aguardan con expectativa, y los opositores deben disimular cierto regocijo, señalan analistas consultados por BBC Mundo.



domingo, 19 de junio de 2011

Hombre mató a su esposa y durmió tres días con el cadáver

Fuentes del Cicpc de los Valles del Tuy, reportaron al diario La Voz que la víctima mortal fue identificada como Jherlys Alexandra Monoche Castro (20). Extraoficialmente se conoció que el cadáver de Monoche Castro estaba oculto en una colchoneta debajo de la cama donde ella dormía.



La policía presume que el móvil sea pasional. Se conoció que la pareja se encontraba en proceso de separación. La muchacha, quien era madre de dos niños de 4 y un año de edad, estaba pernoctando en casa de su mamá, no obstante el miércoles decidió ir a la vivienda que compartía con su marido para dejarle a la niña, mientras llevaba al varón a la escuela.



Todo hace presumir que cuando la mujer regresó a buscar a su pequeña, el hombre la sometió y tras una fuerte discusión la mató. Posteriormente el homicida llevó a la niña a la casa de su abuela, buscó a su hijastro a la escuela, lo dejó igualmente en casa de su suegra y les dijo que Jherlys regresaría en breve.



Henry Kissinger y el preocupande ascenso de China

Moisés Naím

El País, España



Para algunos, Henry Kissinger es un criminal de guerra. Otros le dieron el premio Nobel de la Paz. Para algunos, es un equivocado crónico, y para otros, uno de los estrategas más lúcidos del siglo XX. Tuvo que ver con la tragedia de la guerra de Vietnam y con la normalización de las relaciones entre China y Estados Unidos. Y con decenas de decisiones que moldean el mundo de hoy. En estos días anda promoviendo vigorosamente su más reciente libro sobre China, el cual, como todos los que ha publicado, ya es un bestseller mundial. A pesar de ello, Kissinger dedica tiempo y energías a dar charlas, entrevistas y participar en almuerzos y tertulias alrededor del mundo para hablar de su libro. Vale la pena destacar que hace un par de semanas cumplió 88 años.



Su agilidad mental es sorprendente y en las conversaciones con él emerge con nitidez su cáustico sentido del humor, que utiliza para defenderse de los muchos y muy feroces críticos que tiene. Es muy consciente de que, por más que lo intente corregir, su legado histórico incluirá interpretaciones que él considera injustas -como, por ejemplo, que fue demasiado tolerante con las violaciones de los derechos humanos por parte de los dictadores con los que le tocó negociar-. No acepta esta crítica y cita un caso: "Ahora que se han publicado las transcripciones, se puede ver que en mi primera reunión con Zhu en Lai, en Pekín, y antes de hablar de otros temas, le manifesté nuestra profunda preocupación por la cuestión de los derechos humanos en China y la necesidad de hacer algo al respecto, y que el asunto debía estar en nuestra agenda. Lo planteé a pesar de que yo sabía que esta condición le llegaría inmediatamente a Mao y que podría acabar con las negociaciones".



Sanguinario exjefe militar de ETA confiesa: "La lucha armada ya no procede"

Tras ser detenido en Francia y trasladado a España para que pudieran juzgarle, Garikoitz Aspiazu, Txeroki, no tiene dudas: "La lucha armada no procede". El jefe militar de ETA hasta noviembre de 2008, cuando fue detenido en Francia, explica en sus conversaciones en la cárcel su sentimiento respecto a la situación actual que atraviesa la banda terrorista y la mejor estrategia para el futuro: "Lo mismo que hemos estado cincuenta años con la estrategia de la lucha armada, ahora toca cambiar de estrategia, quizá por otros cincuenta años".



Estos comentarios de Txeroki, a los que ha tenido acceso EL PAÍS, realizados recientemente en la cárcel de Navalcarnero (Madrid) a la que fue trasladado desde Francia el 30 de mayo para ser juzgado, tienen especial trascendencia al proceder del que fue el jefe militar más importante y sanguinario que ETA ha tenido en lo que va de siglo desde la detención en 2001 de Javier García Gaztelu, Txapote.


Indignados amenazan el status quo en España

Bajo el lema 'la calle es nuestra. No pagaremos su crisis', miles de personas recorren en este momento el centro de Barcelona. "¡Nadie nos representa!". Los "indignados" quieren que la marcha discurra en un ambiente festivo para contrarrestar las acusaciones de ser un movimiento violento tras las críticas recibidas por los incidentes del pasado 15 de junio en el parque de la Ciutadella.


Ese día, algunos jóvenes increparon, zarandearon e incluso arrojaron pintura a varios diputados que iban a participar en el debate del Parlament sobre los presupuestos de la Generalitat. Puntual, a las cinco de la tarde, la cabecera ha salido desde la plaza de Catalunya, el punto neurálgico de la protesta del movimiento del 15 de mayo en Barcelona. Media hora después, miles de personas esperaban aún en las inmediaciones de la plaza para poder avanzar.


Todas las mujeres merecen respeto así sean prostitutas

La "marcha de las mujerzuelas", convocada por grupos de mujeres para protestar contra la violencia de género y el acoso sexual, recorrió una céntrica zona de Brasilia. La manifestación fue convocada por distintos grupos, pero todas concentraron en la Plaza de la Torre de Televisión de la capital, desde donde arrancaron rumbo a la Explanada de los Ministerios, una avenida en la que sitúan todos los edificios del poder público, en su mayoría vacíos este sábado.



La marcha forma parte de un movimiento global que nació este año en protesta por comentarios considerados machistas del jefe de la policía de Toronto (Canadá), Michael Sanguinetti. En un seminario sobre inseguridad, el policía afirmó que si las mujeres no quieren ser víctimas de violaciones o acoso sexual "no deberían vestirse como putas", con lo cual encendió una mecha que corrió por el mundo en forma de protestas y manifestaciones, que ya han movilizado a miles de mujeres en decenas de países.


"Queremos acabar con esa idea de que las mujeres son santas o prostitutas. No somos ni una cosa ni otra. Somos libres", declaró la antropóloga Julia Zamboni, una de las organizadoras de la marcha, que congregó a unas 800 personas, en su mayoría mujeres.