A diferencia de lo que ocurrió hace ahora exactamente ocho años en vísperas de la guerra de Irak, los grandes países de la Unión Europea están esta vez de acuerdo en recurrir juntos al uso de la fuerza para proteger a los rebeldes frente a Muamar el Gadafi.
Los jefes de Gobierno de España, Alemania y Reino Unido confirmaron ayer que acudirán hoy en París al encuentro convocado por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para poner en marcha la resolución aprobada el jueves por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas autorizando el uso de la fuerza en Libia. La secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, también estará presente.
El alto el fuego inmediato declarado ayer por Gadafi sorprendió a los países que preparan la coalición militar y plantea el interrogante de qué ocurrirá si se prolonga pero no hay un cambio o un acuerdo político en Libia.