Burgos vive intensamente sus fiestas patronales

Es imposible no contagiarse con el deseo de vivir del burgalés común y de la forma cómo experimentan tan intensamente sus fiestas patronales, las de San Pedro y San Pablo, las cuales comenzaron el viernes pasado, con el típico "Parral" y concluirán este próximo domingo con el día del burgalés ausente, fiesta que ha sido declarada de interés turístico regional.

Todos los burgaleses se tiran a las calles durante esta semana de peñas, cantatas, zarzuelas, musicales, teatro, juegos pirotécnicos, conciertos, exposiciones, corridas de toros, circos callejeros, vinadas, tapas, casetas feriales, música y bailes tradicionales y muchísimas cosas más.

Son ocho días de poco dormir para los burgaleses. Hay muchas actividades y pocos quieren perdérselas. Es un año de espera para mostrar y dar lo mejor de su idiosincracia.

Por lo general el burgalés común está muy a la moda mundial. Es común ver a chicas y chicos con los cabellos de colores intensos, como morado, amarillo, rojo o con algún peinado de vanguardia. Los aires de las modas de la Europa de pasarela también han tocado a España y, en términos generales, podríamos decir que el burgalés se preocupa por vestirse bien y a la moda.

Entre los platos fuertes, totalmente gratuitos para la población, destacan la participación de los artistas: Alex Ubago, Antonio Carmona, Miguel Bosé, Ricky Martin (pago),David de María, Julieta Venegas, entre otros.

EL BURGALES AUSENTE

"Esta actividad se celebra el domingo y pone cada año el punto y final a las fiestas de San Pedro y San Pablo en la ciudad de Burgos. La fiesta traslada su escenario hasta el Parque de Fuentes Blancas, a 5 km. del centro de la ciudad, donde desde primera hora de la mañana se dan cita miles de burgaleses. Ese día se homenajea a los burgaleses emigrados al extranjero. Por medio de la llamada “Operación Añoranza” un grupo de burgaleses de origen y residentes en el extranjero, comparten las fiestas y conviven unos días en la ciudad. Esos días recuerdan el pasado y observan los cambios que la ciudad ha sufrido con el paso del tiempo. Otros burgaleses ausentes de su ciudad natal por diversos motivos se acercan también hasta la ciudad para compartir un día de campo con sus paisanos. Desde primera hora las peñas y Casas Regionales se instalan en el Parque de Fuentes Blancas. Tras la misa de campaña junto a la capilla de la Virgen del Álamo comienza el concurso gastronómico del Buen Yantar, que contribuye a ensalzar la cocina burgalesa y los productos típicos de la tierra. Las peñas participan en las actividades que allí se desarrollan ofertando productos gastronómicos. La fiesta y el bullicio continúa hasta el atardecer con bailes y actividades para todo el público asistente. Es el broche de oro de las fiestas de San Pedro y San Pablo".