Este vez, como en otras ocasiones, Time Magazine ha optado por escoger como Persona del Año a uno propio que ha hecho algo importante que concuerda con la política de los Estados Unidos o al menos no la daña, en lugar de escoger a un rebelde antiamericano que, de igual forma ha hecho algo importante, en pro de la libertad, pero en contra de los intereses del Imperio del Norte.Time optó por el creador de Facebook, Mark Zuckerberg "Por la conexión de más de quinientos millones de personas y la asignación de las relaciones sociales entre ellos, por la creación de un nuevo sistema de intercambio de información y ...".
Cuando escribo esta crítica no significa que no esté de acuerdo que lo que ha hecho Zuckerberg sea bueno y cumpla las normas establecidas para nombrar a un individuo como Persona del Año; no obstante, creo que Time, una vez más, ha apostado por un ser inofensivo o pronorteamericano y ha obviado a alguien que le resultado difícil de tragar a los gringos, como lo es Julian Assange, el creador de Wikileaks.
Es cuestión de apreciación, pero lo que ha hecho Julian Assange en pro de la libertad de expresión en el mundo y de exponer al escarnio público la política mentirosa de los gobiernos, que no sólo del gobierno de los Estados Unidos, sino la doble moral de todos los gobiernos involucrados en esos 250 mil documentos, para los pueblos que no tenemos acceso a este otro mundo que se mueve dentro de las altas esferas de los gobiernos, es importantísimo.
Una vez más Time Magazine se ha metido en un bolsillo sus principios de objetividad y ha optado por el camino más fácil, como lo hizo cuando Osama Bin Laden tumbó el World Trade Center el 11/09/2001. Esa vez, el Personaje del Año, muy a pesar de lo que había hecho y con cuyos métodos terroristas no estamos de acuerdo, el premio le tocaba al líder de Al Qaida, porque cumplía con el perfil estipulado por Time Magazine, pero en lugar de Bin Laden Time nombró a alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani.
Pero no siempre Time ha actuado de espaldas a la realidad, porque Adolf Hitler e Iósif Stalin, en su momento fueron nombrados Personas del Año, lo que no significa necesariamente un honor, sino que el reconocimiento se otorga a quien, para bien o para mal haya influido más en el mundo.
Para nosotros en Venezuela Ahora, el Personaje del Año 2010 es Julian Assange, porque cambió el mundo de la diplomacia para siempre y reveló a más de siete mil millones de personas, la hipocrecía de los gobiernos y su doble moral.
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