Lo último que cocina la robolución bolivariana, es exigir pasaportes venezolanos a los venezolanos ciudadanos de otras naciones. Ya el gobierno ha pasado las comunicaciones a las agencias de viajes en el país y eso es lo que viene, por ahora.¿Qué persigue el gobierno comunista con esta medida? Es simple, controlar y manipular la entrada al país de las personas que ellos quieran, de modo que cuando no quieran que algún venezolano entre al país, simplemente ponen un alerta en su sistema de datos y como la emisión y el control de los pasaportes está en sus manos, pues, no hay alternativa, sea ese venezolano ciudadano norteamericano, o canadiense o de algún país de la Comunidad Económica Europea.
Es más fácil para el gobierno del teniente coronel tomar esta medida para controlar a las personas no gratas, que declarar directamente una prohibición de entrada al país a los residentes o ciudadanos norteamericanos, porque esta última medida sí que les acarrearía algunas consecuencias políticas que por ahora no están dispuestos a tomar.
Cada vez más el gobierno comunista del teniente coronel, estrecha el cerco a las personas que podrían de alguna manera oxigenar la moribunda oposición venezoalana y cada día más, aisla al país de las personas que por derecho, por ser venezolanas, así tengan otra nacionalidad, quieran visitar al país de sus ancestros cuando les venga en ganas.
El teniente coronel cree firmemente que él es el dueño de la nación. Creo que nunca antes, excepto cuando Juan Vicente Gómez hubo una autocracia tan férrea en el país como en este caso y esto es el comienzo del fin, pero no será lo único que pasará en mi país.
La ilustración es cortesía de Tal Cual on line.
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