Las protestas no se han desinflado como buscaba el presidente Nicolás Maduro. Han continuado pese al adelanto de los carnavales para acallarlas y la fuerza de la Guardia Nacional para reprimirlas. Tras 16 días de manifestaciones opositoras por la crisis económica y la inseguridad, el saldo es de 17 muertos, 261 heridos y más de 700 detenciones, según anunció la propia fiscal general Luisa Ortega Díaz.