Los Estados Unidos son adictos a las interminables guerras de agresión contra una nación tras otra: los enemigos inventados para atacar porque no existen los reales. Los Estados Unidos son adictos a las interminables guerras de agresión contra una nación tras otra: los enemigos inventados para atacar porque no existen los reales. América glorifica la guerra en nombre de la paz que aborrece. Las súper armas de hoy, si se usan, arriesgan la destrucción de la humanidad como nunca antes