El 23 de julio de 1931 Pío XI congregó a los cardenales para un encuentro "reservadísimo" cuyos detalles acaban de conocerse al desclasificar el Archivo Secreto Vaticano el discurso que el Papa Achille Ratti pronunció en él, trece páginas que suscitaron controversia entre los purpurados. Tras la firma del Tratado de Letrán el 11 de febrero de 1929, que resolvió la cuestión del estatus de la Santa Sede en la Italia unificada que había invadido los Estados Pontificios, las relaciones entre el Papa y el régimen de Benito Mussolini no habían hecho sino empeorar. Las pretensiones del régimen fascista de monopolizar la educación y controlar toda la sociedad habían llevado a la encíclica condenatoria Non abbiamo bisogno del 29 de junio de 1931, en la que Pío XI usaba palabras de gran severidad contra el régimen (habló de "estatolatría pagana"), que un mes antes había llegado incluso a cerrar centros de la Acción Católica.