Se avecinan días difíciles para los inmigrantes en Europa, la mayoría de los cuales son suramericanos y africanos, porque los de Europa del Este que antes se contaban como inmigrantes, han pasado a formar parte de la Unión Europea, como Rumanía, por ejemplo.Traigo este tema a colación, por varios elementos que se han venido dando en estos últimos meses y que sin duda van a incidir en las relaciones de los países europeos con respecto a la gente que emigra hacia estos países:
1.Acaba de ganar en Fracia un hombre que, a pesar de ser descendiente húngaro, es anti-inmigrante. Pertenece a la derecha francesa, aunque no a los partidos tradicionales. Para que entiendan qué es la derecha en Francia, piensen en los Republicanos norteamericanos, piensen en George W. Bush o en Reagan.
2.Los países europeos acaban de crear un super-comando anti-inmigrante que debe comenzar sus labores tan pronto como ahora en junio de este año.
3.Alemania y Holanda, han manifestado su intención, y están trabajando en eso, de regularizar a los inmigrantes que ya están en esos países, pero después de la regularización vendrá el control de las fronteras.
El nuevo presidente de Francia, se define como profundo admirador de Tony Blair. Muchos recuerdan a Sarkozy por la forma en que describió a los jóvenes inmigrantes en los suburbios de París, antes de los disturbios de 2005. Los llamó escoria.
