No se sabe cuánto tiempo llevaba en la caja fuerte de la biblioteca universitaria de Bolonia, ni cómo aterrizó en la colección de códigos y pergaminos del primer Ateneo de la vieja Europa. Sin embargo, varios exámenes y análisis han confirmado que Bolonia, la ciudad norteña de callejuelas medievales y soportales misteriosos, conserva el texto completo más antiguo de la Torá, conjunto de libros sagrados del judaísmo. Aunque, hasta ayer, no se sabía.