Recostado en su cama en el hospital, Brian Madeux sonríe nervioso mientras está conectado a una sonda intravenosa. Dentro de la bolsa de líquido que cuelga sobre su cabeza están miles de millones de pequeños fragmentos de ADN diseñados para ser insertados en su genoma, el manual de instrucciones biológicas que se encuentra en cada célula del organismo. De 44 años el hombre ha vivido desde el nacimiento con un raro y potencialmente letal trastorno genético conocido como síndrome de Hunter, se convirtió en la primera persona del mundo que es sometida a un nuevo tipo de tratamiento que edita los genes dentro del cuerpo.