Este miércoles, además de liberar al contratista estadounidense Alan Gross -quien captó el mayor interés mediático- Cuba también entregó a Estados Unidos a un misterioso espía que Washington consideraba un preso de alto nivel. Aunque todavía no ha sido identificado oficialmente, diversos medios aseguran que se trata de Rolando Sarraf Trujillo, un cubano que fue detenido por espiar para la inteligencia de Estados Unidos, preso desde hace 20 años en la isla.