"Uno puede decir que morirse ahorita es extremadamente caro", aseguró, a principios de año, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello. Desde entonces los diputados venezolanos trabajan en un proyecto de ley para la Regularización y Control de la Prestación de Servicios Funerarios, Inhumación y Cremación: desde la fabricación de ataúdes, todos los servicios relacionados con la muerte tendrán un precio controlado.