Los letreros escritos a mano se repiten taquilla tras taquilla en las estaciones del Metro de Caracas. "Cerrado". La indicación no impide el uso del servicio de transporte, pero desde hace unos meses nadie tiene que pagar por usarlo. Los billetes, unos cartoncitos amarillo con una franja marrón, se agotaron y no ha sido posible por parte de la empresa estatal importarlos nuevamente. Además, la escasez de efectivo hace inmanejable pagar una tarifa subsidiada, que se ha mantenido sin aumentos por años y que la inflación ya se ha devorado totalmente.