El pasado 6 de mayo, el cadáver de Luis Iván Mejía Beltrán fue entregado a sus familiares por parte del Instituto de Medicina Legal en el departamento de La Paz, en El Salvador. La causa de su muerte, según el hospital donde fue atendido, fue sangramiento del tubo digestivo debido al coronavirus. La víctima era un hombre de 30 años que trabajaba en El Salvador como payaso y que según sus allegados no tenía condiciones médicas preexistentes. La prensa había reseñado días atrás su arresto junto a otras nueve personas en un caso de homicidio.