El ataque el pasado lunes festivo del Frente 59 de las FARC que terminó con las vidas de 12 militares colombianos en la localidad de Majayura, en el departamento de La Guajira, a escasos 200 metros de la zona fronteriza con Venezuela, remató la que es la peor semana del presidente Juan Manuel Santos en materia de seguridad en lo que va de su gobierno. En menos de siete días, tuvo lugar la desactivación de un carro bomba, el pasado martes, ante instalaciones de la Policía, en el centro de Bogotá; ese mismo día la capital se estremeció por el atentado contra el exministro Fernando Londoño, en el que murieron sus escoltas Ricardo Rodríguez y Rosemberg Burbano, y resultaron heridos 48 capitalinos; y el lunes siguiente ocurrió la emboscada guerrillera, que acabó con las vidas de un oficial, un suboficial y 10 soldados.