La Guardia Civil ha encontrado en el caserío Legorreta (Guipúzcoa), donde esta madrugada ha detenido a los presuntos etarras sin fichar Igor y Aitor Esnaola, 850 kilos de nitrato de amonio (un material fertilizante de uso agrícola usado habitualmente por ETA para confeccionar los explosivos), otros 13,5 kilos de pentrita (usado para potenciar las explosiones y fabricar bombas lapa), unos 100 litros de combustible (posiblemente nitrometano), así como tres detonadores, material para fabricar artefactos y detonadores, material informático y documentación en papel relativa a la organización terrorista, según han confirmado fuentes de la lucha antiterrorista. Se trata del mayor depósito de explosivos hallado hasta ahora en España.
Los dos detenidos están acusados de formar parte del comando legal (sin fichar) Erreka, que seguía activo desde hace varios años y figuraba en la documentación intervenida en Francia en 2002 al exdirigente etarra Ibon Fernández Iradi, Susper. Su labor sería, dentro del llamado aparato logístico, el suministrar material a los comandos o enviarlos a zulos donde estos pudieran recogerlos.