Varios movimientos y negocios de un multimillonario argentino de 44 años de edad, radicado en Nueva York, constituyen la nueva pista que siguen los departamentos de Justicia y del Tesoro de Estados Unidos para dar con el paradero de la fortuna oculta de Nicolás Maduro y para asfixiar sus fuentes de inversiones extranjeras. Se trata de Diego Adolfo Marynberg, de origen israelí e identificado como Zev en su pasaporte.