La pandemia de coronavirus está causando estragos en el mundo entero. Y la Iglesia en España no se está librando de los efectos de la Covid-19. Al revés: tiene más y más trabajo, y menos y menos fondos con los que financiar su labor. "Por un lado, se han multiplicado las necesidades a cubrir, tanto en el plano espiritual como en el plano material. Y por otro lado, desde el punto de vista económico sufrimos dificultades.