Hace cuatro años, una figura poco importante en el liderazgo venezolano fue arrestada en Colombia y extraditada a Estados Unidos para enfrentar cargos por narcotráfico. Demostró ser una importante captura. El hombre, Yazenky Lamas, trabajó como guardaespaldas de la persona que muchos consideran como el poder detrás del trono del dictador Nicolás Maduro: la primera dama, Cilia Flores.