"Presidente, presidente" eran los gritos emocionados de miles de personas. El zócalo de la Ciudad de México estaba abarrotado para recibir a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), tras ser investido como mandatario de México. Había gente de todas las edades y los estratos sociales: 160.000 personas según cifras oficiales. Cuando AMLO subió al templete, dispuesto para la celebración con la que da inicio a su gobierno, un grupo de representantes de 68 pueblos indígenas y el afromexicano le realizó un ritual de purificación.