El nuevo organismo de control ambiental de Escocia para el cultivo de salmón propuso nuevas normas estrictas, basadas en un estudio realizado por la Agencia Escocesa de Protección del Medio Ambiente (SEPA), que podría llevar al cierre de algunas granjas de salmón que operan en aguas poco profundas. El objetivo de estas nuevas restricciones es limitar el uso de tratamientos químicos para el piojo de mar parásito, reducir los desechos animales y los alimentos no consumidos de las piscifactorías, así como el desarrollo de un modelo ambiental actualizado, lo que podría significar que algunos sitios tendrán que trasladarse a aguas más profundas. Con mareas más fuertes, informó BBC News .
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