Un nuevo órgano estatal, llamado Consejo Nacional Integral de Servicios y de Cementerios, estará encargado de “regular y controlar las actividades y condiciones de funcionamiento de funerarias y cementerios”. Ese órgano, cuyo presidente será designado por el presidente de la República, ayudará a la Sundecop a fijar los precios de los servicios funerarios y de cementerios. Las compañías del ramo (públicas y privadas) no podrán prestar servicios legalmente si no están inscritas en ese nuevo mecanismo. Con la ley, las empresas tendrán 120 días para adaptarse a sus nuevas disposiciones. De lo contrario, serán multadas.
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