El pueblo de Egipto ha quitado al dictador con quien el resto del mundo se placía hacer negocios, volteando la mirada a la corrupción de un régimen desde la médula, que mantuvo a su pueblo en la miseria, mientras que una pandilla de elitistas sacó diez mil millones de dólares, alegado, apenas porque Mubarak contribuía a la estabilidad en la región.
Era risible cuando no hace mucho tiempo los países hablaban de una “moraleja de la política exterior”, mientras hacían repartos de armas a Indonesia cuando el gobierno masacraba a gente de Maubere de Timor del Este, olvidada convenientemente del mapa político antes de que Portugal tomara la causa y advirtiera a comunidad internacional delo que estaba sucediendo.
No hace mucho tiempo, los mismos países que se desarrollaron después de controlar el flujo de recursos de sus colonias por décadas, o por centurias en algunos casos, eran los mismos que estaban felices al apoyar regímenes dictatoriales corruptos a través del mundo, manteniendo a la gente pisada y bloqueando su movilidad social.
TRADUCCIÓN: AJL-Venezuela Ahora
No hay comentarios.:
Publicar un comentario