El reverendo Frank Wade, un veterano de los debates teológicos de la Iglesia Episcopal, dijo que la denominación una vez estuvo llena con gente como él: "viejos hombres blancos". Era la Iglesia del "establishment", el hogar espiritual de la mayoría de los presidentes de los Estados Unidos, más que cualquier otra agrupación.Ahora, la cabeza de la Iglesia es una mujer quien dice que la Biblia apoya las relaciones homosexuales. Muchos pastores episcopales creen que aceptar a Jesús no es el único camino de salvación. Y V. Gene Robinson, quien vive abiertamente con su pareja homosexual de toda la vida, es el obispo de New Hampshire.
Los episcopales están solos dentro de la corriente protestante principal, en su viraje liberal, pero ellos han sido probados como ningunos otros por sus puntos de vista. La Iglesia Episcopal es el cuerpo Anglicano en los Estados Unidos y muchos líderes anglicanos están furiosos por el alineamiento Episcopal de sus creencias hacia la izquierda.
Comenzando este próximo martes, en Nueva Orleans, los obispos episcopales tienen que tomar una decisión de la cual depende la unidad de la Iglesia: los líderes anglicanos quieren una promesa inequívoca de que los Episcopales no consagrarán a otro obispo homosexual o aprobarán oraciones oficiales para parejas del mismo sexo. Si la iglesia falla en hacer eso para septiembre 30, la feligresía entera de la comunión Anglicana podría buscar otros caminos.
El arzobispo de Canterbury Roman Williams está tomando el raro procedimiento de reunirse privadamente con los obispos en los primeros dos días de conversaciones a puertas cerradas. El líder espiritual de la Iglesia Anglicana encara el peligro real que la comunidad de feligreses, con cerca de 500 años de antigüedad, se divida esta vez.
Los 2.2 millones de miembros de la Iglesia Episcopal, comprende sólo una pequeña parte de los 77 millones de anglicanos a nivel mundial. Pero la salud económica del grupo en los Estados Unidos cubre acerca de una tercera parte del presupuesto de la organización mundial.
Traducido de The Washington Post para Venezuela Ahora por AJL
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