Mostrando las entradas con la etiqueta Apostasía. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Apostasía. Mostrar todas las entradas

lunes, 26 de febrero de 2007

El tiempo del fin


Mucho se ha hablado en los ámbitos religiosos de este tema y a través de la historia de la Iglesia, después de la ascención del Señor Jesús; incluso algunos creyentes del siglo primero (los de Tesalónica), creyendo interpretar correctamente esas señales del fin, vendieron todo lo que tenían, abandonaron sus responsabilidades sociales y se subieron a los tejados para esperar la venida inminente del Señor Jesús.

En el transcurso de estos dos siglos, muchos más han hecho predicciones acerca de la venida de Jesús, han establecido fechas específicas, pero nada ha pasado. El mundo sigue su curso, no obstante los señalamientos de Jesús acerca de una segunda venida siguen en pie y los cristianos que nos atenemos a la Biblia como única norma de fe y conducta, esperamos el retorno de Jesús en cualquier momento de nuestra hisoria, de forma física y visible.

Pero si en algún momento hemos estado más cerca de esa venida, es ahora. Primero, porque la apostasía es un hecho generalizado, esto quiere decir que, existen muchas iglesias, incluso iglesias evangélicas, pero donde ya no se predica a Cristo y donde ya la gente no encuentra solaz espiritual; son más bien clubes donde la gente se reúne y pasa un buen rato, pero de sustancia espiritual, nada.

Segundo, comienzan a surgir iglesias donde, como ésta que funciona en Miami y otras partes del mundo, su líder principal dice que él es el Anticristo, incluso, un día de esos cualquiera de enero de este año 2007, en pleno culto, se abrió la chaqueta, y mostró a la audiencia un número muy especial que se había tatuado:666, el número de la Bestia, según el libro de Daniel y de Apocalipsis. No sólo eso, instó a su feligresía alrededor del mundo a que se tatuaran ese número y de hecho lo hicieron.

Lo único que me resta recomendar a cualquiera que haya leído esta nota es que, si anda en búsqueda de la verdad, se acerque a La Biblia y que recuerde que la verdad no es un sistema de dogmas o creencias, la verdad es una persona:Jesucristo.